domingo, 9 de febrero de 2014

Renuncias


Según la R.A.E. el significado de renuncia es el siguiente:

1: Acción de renunciar.
2: Instrumento o documento que contiene la renuncia.
3: Dimisión o dejación voluntaria de algo que se posee, o del derecho a ello
.http://lema.rae.es/drae/?val=renuncia

En la mundo real esto se traduce en elección de lo que a priori nos supone la opción con mayores beneficios, independientemente del aspecto al que lo extrapolemos, valoramos pros y contras para basar nuestra decisión intentando analizar los riesgos y ventajas que en un futuro nuestra elección supondrá.

Basándome en conversaciones con amigas, he llegado a la conclusión de que somos inconformistas por naturaleza, y siempre tendemos a desear lo que no tenemos, a veces nos dejamos llevar por instintos, deseos o sentimientos.

En un momento dado de nuestras vidas, todos hemos renunciado a algo, independientemente de a que haya sido, siempre hemos tenido que ejercitar este verbo, y no siempre valorando nuestra propia opinión y en ocasiones a favor de terceros, por que en ese momento lo consideramos lo más oportuno.

Cuando se extrapola a las renuncias que hay que hacer en una relación el tema toma un cariz peligroso. Cuando empiezas una relación siempre piensas que va a ser la definitiva,y conforme esta se estabiliza y va tomando peso, nuestros actos y decisiones comienzan a complicarse.

Como en todos los aspectos, siempre hay uno que cede más, lo cual no es reprochable, ya que cuando estas enamorado parece que se tiene una venda en los ojos y de repente tu cabeza toma partido por decisiones plurales y no individuales, nuestra capacidad analítica se va al cajón de los calcetines a hacer la siesta, y terminamos eligiendo lo mejor para la primera persona del plural, sólo por que en ese momento apostamos por lo que nos hace feliz.

El problema, desde mi punto de vista, que evidentemente es sólo eso, mi opinión, cuando pasa el tiempo, crecemos y no siempre la evolución es en plural, a veces esa persona se estanca en una vida, que a sus ojos es perfecta, y tú necesitas otras cosas. Y en ese momento............ te das cuenta de las renuncias que has hecho, generalmente, culpas a la otra persona ,se lo digas o no,de la comodidad en la que se ha instalado
y las limitaciones aspiracionales que tiene.

Hablando con una amiga, que no es necesario nombrar, he visto que nos cegamos cuando nos enamoramos, renunciamos casi sin darnos cuenta como quien pone cucharadas de azúcar al café, pensando que ese nosotros evolucionará al mismo ritmo. ¿No es un poco iluso pensar que dos personas direccionen sus metas en la misma dirección teniendo en cuenta que ni uno es el mismo a través de los años?

¿Por qué cuando tenemos pareja nos cuesta elegir algo por nosotros mismos sin pensar en como afectará a nuestra relación?¿Por qué cuando no tenemos pareja se idealiza la imagen de noches de cena, sofá, copa y película en casa mientras fuera llueve a mares? Y aquí entran en juego las convenciones sociales, que nos empuja a sentirnos culturalmente insatisfechos si no conseguimos el ideal que nos han inculcado desde pequeños con el desayuno de la mañana.

Tengo amigas que tienen relaciones maravillosas, en las que sus parejas son además amigos, tengo amigas que quieren ser madres sin importarles serlo en solitario, tengo amigas que disfrutan su vida sin intención alguna de compartirla más que con amigos, y el denominador común de todas, yo incluida, es que en un momento dado todas cambiaríamos un momento de nuestras vidas por estar en la piel de otras.

¿Qué hay después de la consecución de la meta?¿Por qué renunciamos a sernos fiel a nosotros mismos en pro de la fidelidad a otros?¿Debemos ser fieles y leales a nuestras creencias, ideologías y convicciones en pro de nuestro beneficio o debemos renunciar en cierto momento a ellos en favor de la pluralidad?¿Qué consecuencias puede acarrear psicologicamente renunciar a nuestra identidad?


No hay comentarios:

Publicar un comentario